Deseamos que los fotógrafos interactúen con nuestras cámaras, que disfruten con ellas en sus manos y utilicen sus controles análogos. Al diseñar la serie X, usamos como base las cámaras de cine tradicionales y creamos cámaras digitales intuitivas, incluso para cuando los acontecimientos se desarrollan con rapidez y se precisa gran concentración para ese momento.

La placa superior presenta diales de aluminio con fresado de precisión que proporcionan a las cámaras una sensación de gran calidad que inspira confianza. Muchas de las cámaras y objetivos de la serie X también cuentan con un sellado hermético contra el polvo y la humedad, de modo que pueden seguir utilizándose en condiciones climáticas adversas.

Muchos de los controles, menús y pantallas de las cámaras de la serie X son personalizables y se pueden programar según su modo preferido de actuación. Cuando una función es recurrentemente utilizada, se puede asignar a un botón personalizado de fácil acceso para aprovecharla incluso con la cámara frente al ojo.

Al adquirir una cámara FUJIFILM, se invierte en un producto que durará muchos años. Para seguir el frenético ritmo del cambio tecnológico en fotografía digital, publicamos periódicamente nuevas versiones de firmware para muchas de nuestras cámaras, ofreciendo así nuevas funciones y mejoras en el rendimiento.

Esta es la filosofía japonesa kaizen, traducida como «cambio beneficioso». Incluso después de que adquieras una cámara de la serie X, nos complace insistir en la mejora continua. La instalación de las actualizaciones es sencilla y puede realizarse desde el sitio web fujifilm.com o mediante la aplicación FUJIFILM Camera Remote. ¡Y además es gratis!